Semana 3 (26 de febrero – 4 de Marzo): Día de Andalucía ¿Éxito o desastre?

En esta semana se va a celebrar el día de Andalucía, en el que al parecer va a haber como una especie de gymkana y bocadillos de aceite con azúcar. El lunes 26, fuimos informados mi tutora y yo de que una empresa u organización iban a venir para hacer una gymkana, en la cual hay 8 pruebas a superar. En cada prueba te dan una provincia de la comunidad autónoma de Andalucía y la finalidad es reunir todas las provincias para poder formar Andalucía. El martes 27, vino una chica de la dicha empresa u organización a hablar con nosotros para ver si disponíamos de material, del número de alumnos que hay, de si hay alumnos con necesidades especiales, etc.

Por fin el día tan esperado, el 28 de febrero miércoles. A primera hora llegaron los chicos y chicas de la empresa u organización para ponerse manos a la obra. La verdad es que al principio iban a hacer poquito, porque no tenían los juegos preparados y además, el tiempo no acompañaba y estaba lloviendo. Nosotros nos preguntábamos que como es posible que después de tantas preguntas sobre el colegio no se supiera que juegos se iban a hacer. A ello nos contestaron que ellos tenían diseñada la dinámica y la finalidad de la gymkana, pero no tenían los juegos para poder conseguir cada provincia, que pensaban que de eso nos encargábamos mi tutora y yo. Pues en unos minutos de prisa y con mala gana diseñamos unos juegos rápidos que se pudieron hacer con éxito, pero que con mayor preparación pudiera estar mucho mejor. Y para redondear la mañana, 4 de 8 monitores que vinieron, en el recreo se fueron porque tenían cosas que hacer, y los alumnos que les tocaba hacer las actividades después del recreo, no pudieron hacer la mitad de ellas.

A partir de esta anécdota, la desorganización de este colegio es normal en el día a día. Un día de Andalucía no se merece una celebración así.

Un pequeño percance que me ocurrió y me gustaría contar fue que, toda la mañana me tiré pintando banderas de Andalucía con ceras en la cara de los niños. Un alumno de tantos se me negó a ello, y yo le pregunté que por qué, su respuesta fue que el no celebraba estas cosas. A mí me extraño un poco la respuesta, ya que es un día que a todos los niños les gusta y por eso yo llegue un poco a obligarle a que se pintara la cara, hasta que alumno me confesó que era Testigo de Jehová y que su religión no celebra eso.